Por qué hacer un curso rápido de inglés

Estudiar inglés no tiene por qué ser algo interminable. Se puede hacer un curso rápido de inglés en el que se concentre la mayor parte de los conocimientos. Si dispones de tiempo libre para aprender inglés, los cursos intensivos son la opción más práctica y más eficaz si quieres conseguir objetivos concretos.

A lo mejor piensas que en un curso de inglés de 1 año vas a aprender más. Pero en lo que tienes que fijarte no es simplemente en cuánto dura el curso, sino cuantas horas reales te van a dar. Porque a lo mejor en uno o dos meses puedes avanzar mucho más rápido en uno de nuestros cursos intensivos que durante todo un año en el bachillerato o estudiando inglés por tu cuenta.

En este post nos gustaría que vieras algunas de las ventajas de los cursos de inglés rápidos y cómo te pueden beneficiar para que puedas mejorar el inglés.

Qué son los cursos rápidos de inglés

Los cursos rápidos o intensivos son aquellos en los que se concentra una mayor cantidad de horas de clase en un menor tiempo.

Por ejemplo, en lugar de tener un par de clases semanales, recibes clases de inglés diarias de lunes a viernes, de 2 o 3 horas. Es un tipo de clase en la que pasarás más tiempo interactuando con el inglés y aprendiendo el idioma con tu profesor nativo, lo que te da muchísimo juego para que puedas aprender mejor y más rápido.

Este tipo de cursos son a medida y según tus necesidades. Por ejemplo, a lo mejor quieres unas clases intensivas durante el mes anterior a tu examen FCE (ya sabes, uno de los exámenes de inglés de la Universidad de Cambridge), para ir bien preparado y tener más posibilidades de aprobar. Pues un curso intensivo te ayudaría a estudiar de manera mucho más eficaz.

¿Qué NO es un curso rápido de inglés?

Lo que sí que debes tener claro es que un curso rápido de inglés no te hará aprender inglés para siempre en una semana, de manera que no tengas que volver a estudiar el inglés nunca más.

No, lo cierto es que el aprendizaje de cualquier idioma debe ser continuo, y que de lo que se trata es de que llegues a ser independiente. Que puedas leer, escuchar, escribir, entender o hablar en inglés sin la ayuda de nadie y poco a poco vayas adquiriendo más vocabulario y fluidez a la hora de manejar el idioma.

Un curso rápido de inglés no es un “curso milagro”, sino simplemente un curso con más horas y más concentradas. Es un tipo de curso para los que tienen tiempo y no quieren dormirse en los laureles, porque éste es uno de los problemas al no estudiar inglés todos los días. Que si no estás concentrado, avanzas muy, muy lentamente y al final te queda la sensación de que estás estancando. Con los cursos rápidos de inglés las clases son mucho más efectivas.

Qué ventajas tiene hacer un curso de inglés rápido

Las ventajas de hacer un curso de inglés rápido ya las hemos ido apuntando, pero te las recordamos.

1. Clases concentradas

Porque la mejor manera de acordarse de algo es usarlo todos los días. Si todos los días das 2 o 3 horas de inglés, vas a ver que los resultados son espectaculares.

Mucho mejor incluso que si te apuntas a la Escuela Oficial de Idiomas o acudes a otro tipo de curso donde tengas muchas menos horas de inglés a la semana, grupos muy grandes y los profesores no nativos.

Sin duda una de las mayores ventajas de un curso intensivo de inglés es que se realizan en menos tiempo pero de forma más intensa y el ritmo de aprendizaje es acelerado, en poco tiempo tu nivel de inglés mejorará considerablemente.

2. Cursos de inglés con objetivo

Este tipo de curso no es para estudiar todo el año, aunque también se puede. De lo que se trata es de estudiar de manera concentrada durante el tiempo del que dispongas para conseguir un objetivo.

Por ejemplo, pongamos que te has propuesto aprender inglés en verano y te gustaría llegar a conseguir un nivel C1, pero te encuentras en un B2 o un B1. Con un curso intensivo vas a poder avanzar mucho más rápidamente y tener un conocimiento del idioma más amplio.

Si tienes horas libres en verano, es mucho mejor opción que tener que esperar una semana entre clase y clase.

3. Clases combinadas 1-1 y en grupo

Otra de las ventajas de los cursos de inglés rápido es que aprovechan lo mejor de los dos tipos de clases: las clases en grupo y las clases 1-1 o clases particulares de inglés.

Podrás consultar las dudas que tengas con los profesores, practicar el speaking de manera habitual, mejorar aquellos aspectos del inglés en los que estás flaqueando o incluso preparar una entrevista de trabajo o discurso. Cualquiera que haya disfrutado de una clase one-to-one, sabe que una tutoría personal siempre ayuda mucho para que sepas cómo avanzar más y en qué dirección tienes que ir.

¿Estás pensando en hacer un curso rápido de inglés y mejorar tu nivel rápidamente? Te invitamos a ponerte en contacto con nosotros. Solicita tu test de nivel gratuito para empezar.